lunes, 28 de enero de 2008

10 razones para no entrar en la Carlos III

El título completo de esta entrada sería: 10 razones para no entrar en la Universidad Carlos III = 10 razones para salir de ella. Lo he elegido como una especie de ironía en contraposición con uno de los apartados destacados de la nueva web de la UC3M: 10 razones por las que elegir la Carlos III.



Se decía cuando entre en esta universidad, que era una de las más prestigiosas de España. Realmente desconozco cuál es la situación del Campus de Leganés y de los planes de estudio de las ingenierias; pero lo relativo a los estudios de ciencias sociales y humanidades en Getafe, el plan de Bolonia parece atentar contra el afamado prestigio de esta institución. Podrán seguir siendo prestigiosas las instalaciones, los servicios e incluso algunos profesores y asignaturas, pero en lo respectivo al trato y a la oferta de posibilidades de los alumnos, esta universidad suspende. Y suspende por querer ser pionera en España en la introducción en el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES).
Las desventajas del plan de Bolonia en general, ya han sido expuestas en numerosos lugares. No trato de hablar de eso aquí, sino de señalar las incovenientes que la implantación de este nuevo plan de estudios y cómo perjudica a los alumnos. A fin de cuentas, 10 razones por las que recomendaría evitar, por el momento, a esta universidad:

  • 1. Evitarte uno de los precios de crédito público universitario más caros, por lo menos en la Comunidad de Madrid. Cualquier carrera te saldrá aquí más cara (el "prestigio" hay que pagarlo). Como dato a favor los medios, servicios e infraestrucuturas que ofrecen son bastante sobresalientes (no se puede negar la verdad, tiene cosas muy buenas).

  • 2. El número de convocatorias es sólo 4. Es decir, tienes 2 años para cada curso, y si no, a la calle. Si eres nuevo alumno, no podrás dispensar convocatoria hasta que no llegues a 2º con 1º totalmente aprobado. Por otro lado, sólo se puede dispensar convocatoria una sola vez, teníendo que justificar cualquier otra ausencia por motivos graves con la documentación que sea necesaria. (En el caso de las ingenierias son 6 convocatorias, obviamente. Ahora se puede decir que soy de letras, pero reconozco el esfuerzo extra que se necesita para sacarse una ingeniera).

  • 3. Las ausencias a clase afectan a tu nota. Generalmente perderás del orden de 1 a 2 puntos de la nota final, si faltas a clase. Si tenías la idea de salir del instituto para tener más libertad, es una idea que no es compartida por los dirigentes de esta santa institución. Lo de elegir pasar de una asignatura y jugar al mus, vete olvidándolo. No es que se pase lista, pero hay un porcentaje de la puntuación dedicado al interés/asistencia, y si el profesor no te conoce el día del examen es una puntuación que no tienes.

  • 4. ¿Tienes la intención de trabajar de becario en complemento con tus estudios? Adelante. Trabajarás más horas y con un sueldo menor que un becario de la Complutense, por ejemplo. Trabajas 11 meses, y por supuesto, el mes de "vacaciones" nadie te lo paga. Tampoco tienes derecho a días libres para los examenes (a menos que coincida el examen con tu horario de trabajo, unas horas que tendrás que recuperar). No hay contrato, no trates de reinvindicarte. La Carlos III es una de las universidades que se administra con un bajo número de funcionarios. Por supuesto. El trabajo lo hacen los alumnos becarios. El dato que no se da a conocer abiertamente es que es una de la universidades que más becarios tiene. Teniéndo en cuenta lo que cuestan los créditos, ya sabemos que la política de la Carlos III es invertir en recursos materiales, y no en recursos humanos.

  • 5. Relativo a la aplicación del plan de Bolonia (curso 2009), si llevas un año o 2 sacandote una diplomatura o licenciatura, debes saber que si quieres pasarte a hacer un grado o un post-grado (titulos equivalentes con el plan de Bolonia), no es posible la convalidación de asignaturas. Si quieres hacer un grado, tendrás que empezar desde cero, aunque los programas sean los mismos.

  • 6. Si estás a punto de terminar una diplomatura con la intención de hacer un 2º ciclo en otra carrera para la que no te llegaba la nota de selectividad en su día (ejemplo: entrar en 4º de periodismo o comunicación audiovisual), olvídate ahora mismo. Gracias a Bolonia, seguramente te han hecho perder 3 años (o más) de tu vida. Tendrás que empezar de cero, como grado. Sin duda esto me parece lo más grave de esta lista.

  • 7. Las pocas convalidaciones posibles, sólo se podrán hacer para los que se graduen este junio. Esta es la situación en la que me encuentro yo. Si quiero optar a hacer un grado, me tengo que diplomar en junio, es decir, no me puede quedar ninguna asignatura en septiembre si quiero seguir estudiando de lo mío.

  • 8. Prueba de idiomas obligatoria. No te darán tu título si no has hecho y aprobado un examen de inglés (por lo general), cuya dificultad varía en función de lo que dure tu carrera.

  • 9. 6 créditos de cursos de humanidades obligatorios. Tú decides cuando quieres extender tu apretado horario. Los hay que son prácticamente iguales o más duros que una asignatura, con sus trabajos, sus exámenes, etc, y todos de asistencia obligatoria. Culturizarse (el único fin de estos créditos, deberían ser opcionales, o en su defecto, más ligeros).

  • 10. Una última razón (compartida, por cierto, por algunos profesores), es que se ha caído como en tantas otras universidades en tender a politizar las titulaciones (principal razón de la pérdida del "afamado prestigio"). No hablo de política en general, que a fin de cuentas, afecta a todo; sino más bien de aplicar políticas personales a la hora de estructurar el plan de estudios y orientar hacia una sola dirección una carrera. Hablando en plata: no se puede dirigir únicamente y dar privilegios a ciertas asignaturas porque seas catedrático especializado en ese área. Un plan de estudios es una cosa muy seria, y hay que elaborarlo con la mayor objetividad y abriéndo todas las puertas posibles a los alumnos. Tendría que realizarse por expertos y especialistas ajenos a la universidad, por antiguos alumnos y por los responsables de departamento, y no sólo por estos últimos. Hay especialidades que están siendo excluidas del ámbito universitario, para pasar a formarse a través de cursos privados generalmente caros. Sólo un ejemplo más de las desventajas de Bolonia: tender a privatizar los estudios y la universidad.

Quiero insistir en que no es sólo la implantación de Bolonia, la única razón por la que seguramente mucha gente abandone esta universidad. Se llevan arrastrando, desde hace unos años, una serie de problemas internos que llevaban a cerrar las puertas a ciertas especializaciones que no concordaban con la política de determinados cargos que administran las titulaciones. Algo que se ha extendido a muchas carreras especializadas, especialmente desde el cambio de rector.

Yo pensaba que la universidad estaba para abrir puertas, no para marcate un único camino que alguien ha elegido por intereses privados. Pero debe ser que soy un iluso. ¿Qué hacer como individuos que somos? Ahora mismo se me ocurre poco. Parece que ya no hay interés por reivindicar una situación digna que no sea desfavorable, al menos colectivamente. Por eso, la mejor vía si vas a empezar una carrera o estás terminando una en la Carlos III, es largarte de ahí.

Me gustaría que la primera entrada de 2008 de este blog, estuviera centrada en la temática a la que se destinó cuando se creó, pero he considerado esto lo bastante importante como para sacarlo de mi espacio personal a un blog al que pueda llegar a más gente (o eso espero).